Seasons of love...
Seasons of Love...
In memoriam, José Dima, 2 de agosto de 1935- 25 de febrero de 2021
Five hundred twenty five thousand six hundred minutes
Five hundred twenty five thousand moments so dear
Five hundred twenty five thousand six hundred minutes
How do you measure? Measure a year?
Five hundred twenty five thousand moments so dear
Five hundred twenty five thousand six hundred minutes
How do you measure? Measure a year?
In daylights,
In sunsets,
In midnights,
In cups of coffee,
In inches, in miles, in laughter, in strife
In sunsets,
In midnights,
In cups of coffee,
In inches, in miles, in laughter, in strife
In five hundred twenty five thousand six hundred minutes
How do you measure a year in a life?
How do you measure a year in a life?
How about love?
How about love?
How about love?
Measure in love...
Seasons of love...
Seasons of love...
How about love?
How about love?
Measure in love...
Seasons of love...
Seasons of love...
Five hundred twenty five thousand six hundred minutes
Five hundred twenty five thousand journeys to plan
Five hundred twenty five thousand six hundred minutes
How do you measure a life of a woman or a man?
Five hundred twenty five thousand journeys to plan
Five hundred twenty five thousand six hundred minutes
How do you measure a life of a woman or a man?
In truths that she learned
Or in times that she cried
In bridges he burned
Or the way that she died
Or in times that she cried
In bridges he burned
Or the way that she died
Its time now to sing out though
The story never ends
Let's celebrate remember a year in a life
Of friends
The story never ends
Let's celebrate remember a year in a life
Of friends
Remember the love...
(Oh you gotta remember the love)
Remember the love...
(Oh yeah, its a gift from up above)
Remember the love...
(Sing out, give out, measure your life
In looooooove...!)
Seasons of love...
Seasons of love...
(Oh you gotta remember the love)
Remember the love...
(Oh yeah, its a gift from up above)
Remember the love...
(Sing out, give out, measure your life
In looooooove...!)
Seasons of love...
Seasons of love...
¿Cómo despedirme del hombre que me dio la vida? ¿Cómo aceptar todos los momentos que soñaba para un futuro que no va a ser posible?
Se fue mi viejo, mi papá, mi superhéroe de mi infancia. El tano cabeza dura. El eterno discutidor de política. El que me enseñó muchas más cosas de las que le valoré en el momento de enseñármelas. Yo no tuve la mejor de las relaciones cuando mi individualidad dejó de ser la de la nena de papi y comenzó a ser la de la mujer que se estaba formando. Pero nada de eso importa, es cierto que la pátina de oro que te da la muerte hace que esas cosas hoy no importen, que hoy sea tiempo de valorar las cosas buenas, no las otras.
Me inculcaste el amor por la lectura, aunque ya no leyeras tantos libros, sino muchísimos diarios, me alentaste a leer desde chiquita. Me diste una formación ciudadana duradera. Todavía recuerdo llegar a la Plaza a celebrar la democracia, sentada en tus hombros o de tu mano. No sabía lo que había pasado antes, pero sí sabía que lo que estaba pasando era importante. Y me mostraste la historia como la viviste vos. Y me impulsaste, intencionalmente o no, a buscar mi propia interpretación de los hechos de una Argentina que aún hoy no se reconcilia con su historia. Gracias a vos, como punto de partida, tengo hijos que leen la historia sin juzgar con los valores actuales pero sin aceptar que las cosas que se repiten en los resúmenes Lerú del mundo sean la verdad absoluta.
Me enseñaste a amar a unos abuelos que no conocí, desde las tradiciones de la comida hasta las historias repetidas. Es como si los hubiese conocido, ¿sabés? Gracias a vos. Y la madre patria tira, también. Cuando pase esta pandemia, voy a visitar ese pueblo donde los Dima y los Murano formaron tu familia. Me lo debo. Te lo debo.
Me llevabas a la plaza, a la catequesis y a ver tu trabajo que para mí era la carta de presentación de una vida increíble ¡Mi papá trabaja en los aviones! Me contabas de cuando viviste en Estados Unidos y el sistema funcionaba. Me hablabas en inglés desde chiquita, ese idioma que aprendiste casi solo con los libritos con olor a viejo que me encantaban de tu biblioteca.
Me cuidaste como sabías, tardaste demasiado en confiar en que yo podía defenderme del mundo, pero terminaste dándote cuenta. Ahora entiendo, con mi realidad de madre, que estabas en una generación bisagra, que no era tan claro para dónde orientar el cuidado de una hija. Ahora sé que no lo hiciste con intención de cortarme las alas. Tenías miedo de los predadores. No sabías que sin saberlo me criaste para volar alto. Como un cóndor, no como un gorrioncito débil. Me diste alas para tomar la decisión de emigrar con mi familia, a buscar horizontes donde pudiéramos crecer con nuestros valores. Ojalá estés cerca de Jesús y te presten un ratito los anteojos de Tata Dios, que me veas el corazón y la mente al mismo tiempo, sin la barrera de todas las veces que te frenaba en las conversaciones eternamente repetidas. Perdonáme, necesitabas que te escuche más, pero tal vez ahora veas que te escuché mucho más de lo que parecía, en esos momentos en que no sabías que te estaba escuchando. Tengo algunas cosas tuyas que no pensé que me ibas a pasar y acá están. Esos gestos, esas formas de cuestionar, sí, es verdad me las pasaste. Yo no voy a decir que fui abogada por tantas peleas con vos, como lo decías vos, pero sí me entrenaste de una forma que no pensaste para que no le tenga miedo a esos "viejos carcamanes" abogados de quinientos años que me trataban de amedrentar porque era joven y mujer. La fuerza de enfrentarlos con astucia y conocimiento, esa la aprendí sentada a la mesa de discusiones con vos.
Te costó verme partir a formar mi propia casa. Entiendo que tu temor era perderme en tu vida. Pero le dimos la vuelta a la taba, y encontramos una forma de relacionarnos cuando viste crecer mi familia. Aprendiste a estar en los momentos de paso de mis hijos, y me dabas una mano con algunas cosas de la vida misma. Yo aprendí a escuchar un poco mejor.
Y hace 10 años atrás aceptaste mi partida con dolor. Al fin y al cabo, comprendiste que luego de años de contarme cómo este país cambió tu vida, era muy difícil decirme que no iba a pasar con la mía. Acá estoy, en esta casa cerca de Nueva York, como te gustaba a vos. Me hubiese encantado que vinieras alguna vez para verla. Ahora la vas a ver, sí, aunque yo no te vea a vos.
Gracias por aprender después de tantos años a decirnos que estabas orgulloso, que nos querías, que siempre estuviste orgulloso. Yo estoy orgullosa de todo lo que lograste, desde donde saliste y hasta dónde llegaste, y vas a llegar en las vidas de tus hijos y nietos.
En estos últimos tiempos, también, me sorprendiste. Vos, con tus estructuras arcaicas, diciéndole a tu nieta que te da orgullo que ella quiera ser ingeniera. Increíble. A mí no me dejabas jugar con tus herramientas... bueno, un poco sí. Pero pudiste evolucionar ese pensamiento con más de 80 años, ¿viste que sí podías cambiar de grande?
Quedate tranquilo, que mis hijos te recuerdan con amor. Quedate tranquilo, que me criaste fuerte. Quedate tranquilo, que te vamos a cuidar a mamá. Y que le vamos a seguir diciendo al "Barba" que te perdone los errores, que te lleve a casa, a tomar mate con los amigos, con los tíos, con los abuelos. Ahora, cuidame desde allá, porque el mundo está incompleto para mí con vos allá. Te quiero, pa.
Remember me
Though I have to say goodbye
Remember me
Don't let it make you cry
For ever if I'm far away
I hold you in my heart
I sing a secret song to you
Each night we are apart
Remember me
Though I have to travel far
Remember me
Each time you hear a sad guitar
Know that I'm with you
The only way that I can be
Until you're in my arms again
Remember me
Though I have to say goodbye
Remember me
Don't let it make you cry
For ever if I'm far away
I hold you in my heart
I sing a secret song to you
Each night we are apart
Remember me
Though I have to travel far
Remember me
Each time you hear a sad guitar
Know that I'm with you
The only way that I can be
Until you're in my arms again
Remember me
Comentarios
Publicar un comentario